¿Cómo cambiar la arena de mi filtro?

La limpieza regular del filtro de arena es una tarea de vital importancia para garantizar el correcto funcionamiento y la eficiencia a largo plazo de su sistema de filtración en la alberca. Por lo general, se recomienda realizar un cambio de arena cada 3 o 4 años, pero si utiliza tratamientos químicos específicos, como pastillas multiacción con sulfato de cobre, se aconseja considerar este proceso cada 2 años.

En cualquier caso, al emprender la tarea de mantenimiento, es fundamental comenzar por verificar con atención el modelo y las especificaciones exactas de su filtro. Este paso le permitirá determinar la cantidad precisa de arena que se debe reponer. Cada filtro tiene requisitos específicos en términos de capacidad y tipo de arena, por lo que comprender estas características es esencial para lograr un rendimiento óptimo.

Además, al conocer las recomendaciones específicas de su filtro, puede adaptar el programa de mantenimiento de manera más efectiva a las necesidades particulares de su sistema de filtración. Este enfoque personalizado no solo maximizará la eficacia del filtro, sino que también contribuirá a prolongar su vida útil, ahorrándole gastos innecesarios a largo plazo.

Te explicaremos paso a paso sobre como es que debes darle el mantenimiento correcto:

1. Detener el flujo de agua a través del conducto que se extiende desde el skimmer y la válvula de retorno cerrando todas las llaves y moviendo la palanca selectora a la posición de 'CERRADO'. En caso de no contar con una válvula en la tubería de retorno, será necesario reducir el nivel del agua por debajo de los chorros que impulsan agua hacia la alberca.

2. Vaciar el filtro de agua retirando el tapón roscado ubicado generalmente en la base del filtro.

3. Desmontar la tapa del filtro, la cual suele encontrarse en un lateral o en la parte superior. Esto proporcionará acceso al interior donde se encuentra la arena. En algunos casos, la válvula selectora o el cabezal mismo actúan como la tapa.

4. Cerrar la tubería de difusión con un trapo o esponja para evitar la entrada de arena.

5. Extraer la arena del filtro, utilizando un cucharón si es necesario. Tenga cuidado de no dañar las crepinas, pequeños filtros situados en la base del filtro, al retirar la arena.

6. Enjuagar el interior del filtro con una manguera para eliminar posibles residuos de arena que puedan quedar incrustados en la base.

7. Revisar las crepinas una vez el filtro esté vacío de arena y agua. Puede desenroscar las crepinas y verificar su estado. Se recomienda reemplazarlas cada dos cambios de arena, por lo general.

8. Llenar el filtro con arena nueva, utilizando la cantidad específica para su modelo. Es crucial tapar la tubería interna con un trapo o plástico. Asegurarse de cerrar el tapón de la base.

9. Cerrar la tapa del filtro, asegurándose de que no haya arena en la junta, ya que podría provocar fugas de agua. En caso de que la junta esté reseca, se puede lubricar con vaselina neutra. No utilizar un "producto multiusos".

10. Restablecer el flujo de agua y comenzar la secuencia: 'Enjuague' durante 30 segundos, seguido de 'Lavado' durante 5 minutos. Repetir la secuencia hasta que el agua salga limpia.

11. Ahora sí, el filtro puede volver a configurarse en modo de Filtración.

Siguiendo estos sencillos pasos, podrás llevar a cabo un mantenimiento efectivo en el filtro de arena de tu piscina, asegurando así un funcionamiento óptimo. Mantener tu filtro en condiciones adecuadas garantiza no solo la claridad del agua, sino también un disfrute continuo y sin contratiempos en tu alberca. Al dedicar un tiempo mínimo a estas prácticas de mantenimiento, estarás contribuyendo a la durabilidad de tu sistema de filtración y a la calidad general de la experiencia acuática en tu hogar.